lunes, 27 de septiembre de 2010

FALLECE JOSÉ ANTONIO LABORDETA

No podíamos pasar por alto el fallecimiento de LABORDETA, no solo por los ratos que nos ha hecho pasar, sino por su compromiso con la sociedad, con los demás, intentando mejorar el mundo que le tocó vivir.
Lo hizo desde sus canciones, desde su anecdótico escaño del congreso, desde su universidad, desde su tierra...
LABORDETA, amigo, aunque no te conociera personalmente, gracias y hasta siempre...




¿Cuántas veces hemos entonado sus canciones en nuestros campamentos?

¿Cuántas veces hemos cantado la Albada después de alguna celebración de nuestra Asociación? Hay personas que dejan huella, canciones que marcan y emocionan cuando se cantan o escuchan. Este es el mejor homenaje y recuerdo que podemos tener con José Antonio Labordeta, seguir tocando y cantando esas letras que nos recuerdan que nuestra tierra es Aragón.

Adiós a los que se quedan
y a los que se van también.
Adiós a Huesca y provincia
a Zaragoza y Teruel.

Esta es la Albada del vientola albada del que se fue
que quiso volver un día
pero eso no pudo ser.

Las albadas de mi tierra
se entonan por la mañana
para animar a las gentes
a comenzar la jornada.

Arriba los compañeros
que ya ha llegado la hora
de tener en nuestras manos
lo que nos quitan de fuera.

Esta albada que yo canto
es una albada guerrera
que lucha porque regresen
los que dejaron su tierra.
Descanse en paz.

LIBRO SOBRE EL ESCULTISMO MUNDIAL de EDUARD VALLORY


Se publica un nuevo libro sobre el escultismo mundial.

Del blogs del MSC extraemos y publicamos la siguiente información por su gran interés para todas aquellas personas que formamos parte de la "HISTORIA DEL ESCULTISMO"
La publicación, titulada L’escoltisme mundial: La discreta remor d’un bosc que creix (El escultismo mundial: El discreto murmullo de un bosque que crece.) de Eduard Vallory es un libro sobre el movimiento scout mundial que pretende recoger las diferentes características y maneras de trabajar de este movimiento.
Es un trabajo que quiere dar una visión de conjunto de un movimiento educativo no gubernamental presente a 165 países de los cinco continentes y que llega a más de 30 millones de niños y jóvenes.
El acto para dar a conocer esta publicación sobre el escultismo mundial contó con la presencia del autor del libro, Eduard Vallory, los ex-presidentes de la Generalitat de Catalunya, Pasqual Maragall y Jordi Pujol, y el presidente del Parlament de Catalunya, Ernest Benach.
El dialogo será conducido por la rectora de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), Imma Tubella.
La obra muestra los principales elementos que caracterizan el movimiento scout en todo el mundo desde una visión local hasta una global. “El escultismo es el barrio y también es el mundo. El escultismo es un campamento en el Montsant y es el hermanamiento de jóvenes en países en guerra.
El libro también explica la capacidad territorial del escultismo presente en más de 165 países de todo el mundo, su desarrollo histórico y los principios e ideas que se comparten como movimiento global.
Eduard Vallory es doctor en Ciencias Políticas con la tesis: La educación en la ciudadanía global, que ha servido de base para su libro.
Además Vallory tiene un largo recorrido en el mundo scout, siendo jefe de grupo de dos grupos scouts de Escoltes Catalans (EC), jefe de Relaciones Exteriores de EC, Comisario Internacional de la Federació Catalana d’Escoltisme i Guiatge (FCEG) y presidente de la Fundació Escolta Josep Carol.

Más información: http://www.escoltesiguies.cat/node/2325

lunes, 13 de septiembre de 2010

¿POR QUÉ UN CAMPAMENTO SCOUT?

Desde la página del MSC me permito copiar aquí el magnífico escrito que en ella aparece, entre otras cosas, porque ese descubrimiento de motivos hace que muchos de nosotros, aunque ya no estemos "en activo", nos lleven a descubrir lo que es y el pará qué de "un campamento scout".

Desde aquí me permito felicitar a su autor y agradecerle los minutos de satisfacción que he disfrutado al leerlo. GRACIAS.

"¿Por qué un campamento scout?

Me han pedido que escriba los motivos por los que envío a mis hijas a un campamento scout, en lugar de a otro tipo de actividad; pero no resultan muy fáciles de explicar motivos no tangibles.

Cuando se aproxima el verano, comienzo a oír comentar a conocidos y compañeros de trabajo que están buscando campamento para sus hijos, se intercambian información sobre ellos, que consiste, sobre todo, en la comodidad y lujo de las instalaciones: agua caliente, lavandería, personal de limpieza, además de comentar qué tipo de colchón hay en las camas, también valoran la posibilidad de elegir distintos menús...vamos, a años luz de lo que yo conozco.

Para estas personas no es fácil comprender por qué existen algunos locos como yo, que insisten año tras año en enviar a sus hijos todos los veranos a dormir en el suelo, comer sentados en un palo que ellos mismos han tenido que clavar, comer un menú sencillo y único -cocinado por gente inexperta- y lavarse con cubos de agua del río a una temperatura ambiente que suele estar por debajo del umbral de la confortabilidad.

Sin embargo, son precisamente estas cosas las que me animan a enviar a mis hijas a disfrutar y enriquecerse en las condiciones más elementales de vida, donde todo lo que en casa consideramos necesario, comprobamos que es superfluo, dónde lo único realmente imprescindible es el trabajo en equipo y la ayuda mutua.

Mis hijas, como todos los niños y adolescentes de este siglo, tienen una compulsiva adicción a los aparatos electrónicos, van por la calle con el auricular del "manos libres" del móvil en una oreja y el del "MP3" en la otra; con cables colgando de sus cabezas como si fueran un robot sin terminar, y continúan con ellos puestos mientras chatean en Internet o juegan con la videoconsola.

¿Por qué renuncian a todo ello durante quince días?

¿Por qué pudiendo elegir asistir a otro en el que no les obligan a comer lo que toca ese día, ni a fregar cacharros o hacer construcciones, prefieren el de los scouts?

El ambiente que se respira de camaradería, de apoyo, de tolerancia, no es comparable con el de otro sitio en el que no existan las mismas condiciones y necesidades.

Es milagroso ver cómo el más egoísta en su casa es capaz de compartir media salchicha sin que nadie se lo pida, cuando la cena se ha quedado corta.

El concepto de propiedad privada cambia, siempre puedes encontrar quien te preste una camiseta, aunque sea siete tallas más pequeña y su propietario tenga el pleno convencimiento de que se la devolverán del tamaño de un poncho militar.

Poder presenciar de qué manera el niño que está más acostumbrado a pelear a muerte con sus hermanos por la posesión de un silbato chupado que hace tiempo extravió la bolita capaz de hacerle sonar, puede prestar su única linterna en una noche cerrada, o compartir cuchara y escudilla con alguien que acaba de conocer en ese mismo campamento, aunque no sea de su unidad, es algo que alucinaría a casi todos los padres.

Cuando los niños regresan de un campamento así, traen consigo experiencias que no podrían vivir en otro lugar y el recuerdo de unas vivencias que les acompañarán toda la vida, amigos en los que podrán confiar aunque pasen años sin verse y un enriquecimiento personal, que, sin ninguna duda, estará configurando su carácter.

Las actividades que realizan, no son únicamente de entretenimiento, sino que están pensadas por personas que conocen a los chavales personalmente y la relación que mantienen con su grupo, con su unidad o patrulla; están destinadas a mejorar sus puntos débiles y a potenciar sus virtudes, anteponen el progreso personal a la competitividad a la que estamos acostumbrados.

Y es que la mejor superación es la de uno mismo, y no a los compañeros.

Cualquier niño con baja autoestima, volverá de un campamento con una sensación de superación, porque le han hecho sentir necesario para los demás, ha colaborado en las construcciones de las que todos se han beneficiado y ha sido capaz de valerse por sí mismo en unas condiciones a las que no estaba acostumbrado lejos de su familia.

No creo que en ningún otro tipo de campamento, donde los monitores conocen a los chavales cuando suben al autocar, pueda trabajarse la educación con tanta eficacia.

Yo hasta ahora no he encontrado ninguno ni mejor ni parecido, por lo que no puedo más que defender los campamentos scouts frente a cualquier otro."

jueves, 9 de septiembre de 2010

PREMIO SOLIDARIO ANÓNIMO XI EDICIÓN


La Plataforma del Voluntariado de la Región de Murcia y la Universidad de Murcia, Escuela Universitaria de Trabajo Social, convocan la XI Edición del Premio Solidario Anómino, en colaboración con Vicerectorado de Extensión Cultural y Proyección Universitaria de la UMU y el Colegio Oficial de Diplomados en Trabajo Social y Asistentes Sociales de la Región de Murcia, la undécima edición de Premio Solidario Anónimo 2010.

Las candidaturas podrán ser presentadas hasta el día 5 de noviembre de 2010 bien en la Escuela Universitaria de Trabajo Social de la Universidad de Murcia. Campus Universitario de Espinardo. 30071 Espinardo-Murcia. Tfno.: 868883496 y en la Plataforma del Voluntariado de la Región de Murcia, debiendo indicar en el sobre: "XI Premio al solidario anónimo".

Dotación: Al candidato o candidata que se seleccione se le hará entrega de un premio consistente en una escultura realizada por el Excmo. Sr. D. Antonio Campillo, Doctor Honoris Causa por la Universidad de Murcia. La persona física o jurídica que presente la candidatura ganadora también recibirá una mención de reconocimiento.
No queremos dejar solamente en el recuerdo que en la pasada edición del Premio Solidario Anónimo se lo entregamos a nuestra amiga, maestra y hermana scout Mercedes Hernández, esposa de nuestro querido Luis Molina Niñirola, que fué guardador, continuador y Comisario de la Zona VI de Murcia de los Exploradores de España. De este acto tenéis fotos y toda la información en la siguiente Web: http://lechuzaalacechoscout.org

Más información: Tfnos.: 868883496 y 968218200